Libertad.

Libertad le puse al poema
que escribí mientras tiraba
el celular contra la pared
y gritaba
LIBERTAD!.
y respiraba aliviado
y respiraba feliz
porque hoy podría
dormir tranquilo
sin nada vibrando
sin nada iluminando
mi cara en la noche.

Hombre del siglo veintiuno.

Soy un hombre del siglo veintiuno
y me avergüenzo de la poesía
pero la necesito, un poco más
de lo que ella me necesita.

No sé amar sin observar detalladamente
ni querer incondicionalmente
las redes sociales condicionan mi confianza
no es amor sin likes de por medio.

Soy un hombre renegado, del siglo veintiuno
y no me avergüenzo de mi poesía
la métrica y la rima ya no se llevan como antes
la verborrea predomina en mis pensamientos.

No soy paciente, me gustan las cosas instantáneas
y he visto las estrellas dos, quizás tres en mi vida
las luces de las ciudades encandilan mi juicio
y la luz de la tele opaca las luces de las velas.

Soy un hombre promedio del siglo veintiuno
y combato la depresión con paquetes de veinte
compro felicidad en forma de pastillas
aunque generalmente me la tomo desde la botella.

Me tiemblan las manos y las piernas
cuando dejo de saber de ti por un par de horas
tengo toda la información del mundo en mi bolsillo
y no se me ocurre nada que hacer con ella.

Soy un hombre del siglo veintiuno
y no debí vivir en este siglo.

mis problemas
no me definen
pero por ahora
una pastilla más
y a la cama
cuando despierte mañana
si despierto mañana
veré que hago.
Te quiero, un montón
pero no vale la pena
si tú quieres a otro.

no te hacía falta
no te hacía falta para nada.

sabí qué
porque yo sí sé
hay un montón de weás
que no puedo ofrecerte
no me saco fotos todos los días
de hecho, una vez al año
no hago breakdance, ni toco guitarra
el día del orto te extraño con un hit en la radio
no ando en moto, ni siquiera manejo
me curo todos los fin de semana
sin excepciones
no fumo pito, porque me cortan el carrete.
Una vez me encontraste atractivo
y me es más que suficiente.

Pero sé también, que hay un montón de cosas
que sí sé que te las puedo dar
y la verdad, te las voy a dar mejor que nadie.
Sé donde te gusta sentarte en el cine
lo que te gusta comer
sé tus bromas, y tus miedos
sé porqué te gustan tus caciones
y puedo escribirte de tantas maneras
aunque nunca hayas sido mía
como corresponde
es que
puedo escribirte tan bonita
puedo escribirte tan maraca
puedo escribirte tan real
así como oye
yo te quería
pero solamente
porque yo sí quería quererte,

Y si la veí mejor pregúntale
por qué dejó de quererme
y me contai
o mejor no,
no me cuentes nada.